Crítica de Macbeth con Michael Fassbender y Marion Cotillard

CRÍTICA DE Macbeth – 2015 – DIRIGIDA POR Justin Kurzel – GUIÓN DE: Jacob Koskoff, Michael Lesslie, Todd Louiso. Basada en la tragedia de William Shakespeare – PROTAGONIZADA POR: Michael Fassbender, Marion Cotillard, David Thewlis, Elizabeth Debicki, Jack Reynor, Sean Harris, Paddy Considine, Julian Seager, David Hayman, James Michael Rankin, Barrie Martin, Ross Anderson

ARGUMENTO: Macbeth es la historia de un líder y valiente guerrero de la Escocia del siglo XI que acabará abatido por la ambición y el deseo. Macbeth, duque de Escocia, recibe la profecía de tres brujas que le dicen que un día se convertirá en rey, pero no será padre de reyes. Consumido por la ambición y animado por su esposa, Macbeth asesina al rey Duncan y toma el trono. Película basada en la obra dramática de William Shakespeare.

macbeth cartel

Con silencio y tragedia, así comienza Macbeth de Justin Kurzel, o más bien deberíamos decir el Macbeth de Michael Fassbender y Marion Cotillard, duo que con sus soberbias interpretaciones nos lleva en volandas por la trágica vida del guerrero Macbeth, un héroe que se convirtió en villano. Tras el drama, llega el ruido con los sonidos de las espadas al chocar las unas contra las otras, en una escena que nos recuerda demasiado al Braveheart de Mel Gibson, sólo que los guerreros capitaneados por Macbeth no tienen faldas, ni melenas en el aire, son un auténtico ejército de soldados ordenados y entrenados que más bien parecen romanos. Son guerreros sin piedad, dispuestos a arrasar todo lo que se ponga por delante de ellos. Así, en esta escena, Macbeth se presenta ante nosotros como un ser fuerte que no teme a la muerte y ambicioso, mucho, tanto que no le importa acabar atrozmente con soldados que son casi niños.

Tenemos que aclarar que, aunque hay alguna batalla,  ésta no es una película de guerras medievales es, más bien, una guerra interna, una batalla que se libra en la mente del antihéroe representado por Michael Fassbender. Macbeth no es una película de frenética acción, es una obra de teatro trasladada a la gran pantalla.

William Shakespeare que estás en los cielos

El autor inglés es uno de los más queridos por el cine. Sus obras de teatro se han llevado a la gran pantalla en multitud de ocasiones, pero son muy pocas las que han sabido adaptar y homenajear a William Shakespeare. Romeo y Julieta de Franco Zeffirelli, Hamlet de Kenneth Branagh, Macbeth de Orson Wells, El Mercader de Venecia con Al Pacino o Trono de Sangre de Akira Kurosawa son algunos ejemplos que nos vienen a la cabeza cuando pensamos en películas que han sabido trasmitir la esencia de la obra de Shakespeare en sus libretos.

Macbeth

Por su parte, en el caso de Macbeth, la obra más tormentosa y violenta de William Shakespeare, además de una de las más incomprendidas, ha saltado al cine en 16 ocasiones, pero no se recordaba una película tan redonda del guerrero escocés desde el Macbeth de Roman Polanski de 1971. Han tenido que pasar 44 años para que un australiano, Justin Kurzel, nos devuelva con su impecable realización la magia de William Shakespeare. Hay ligerísimos cambios en el guión frente a la obra de teatro y un pequeño narrador, que en realidad es uno de los personajes de la obra, que nos aclara cualquier duda que nos pueda surgir. Además, se han fomentado los momentos íntimos entre el matrimonio formado por Macbeth y Lady Macbeth. Las conversaciones de alcoba dejan claro las ansias de poder de los dos personajes y lo fácil que resulta que nos manipulen la mente cuando estamos receptivos.

¡Viva el rey Macbeth y Lady Macbeth!

Aunque en la película dirigida por Justin Kurzel aparecen muchos personajes, tantos como en la obra de teatro, toda la acción se sustenta sobre Michael Fassbender y Marion Cotillard. Interpretar a cualquier personaje de Shakespeare siempre es un honor para los actores, pero si hablamos de Macbeth lo es todavía más por la fuerte evolución que sufren a través de los distintos actos. Los dos actores están fantásticos y se complementan a las mil maravillas, no nos extrañaría que terminaran siendo nominados en alguna gala de premios.

El papel de Lady Macbeth es toda una perita en dulce para cualquier actriz. Marion Cotillard lo hace suyo, no lo exagera y nos demuestra todo su talento interpretativo al emocionarnos, aunque sea únicamente con la mirada. Cotillard trasmite al espectador todas las ansias de grandeza que alberga en su interior Lady Macbeth pero, al mismo tiempo, es capaz de conmoverte cuando las cosas salen mal. Normal que Macbeth caiga rendido a sus encantos.

Michael Fassbender y Marion Cotillard

Pero, si la interpretación de Cotillard es fantástica, la de Fassbender no lo es menos. A lo largo de la película vemos cómo evoluciona Macbeth y pasa de de un héroe feliz y contento a un ser atormentado y perturbado. El actor alemán consigue dividir por completo las diferentes etapas de personalidad que sufre su personaje durante el largometraje y logra una interpretación que no necesita de un exagerado cambio físico para ser creíble. Le basta con adelgazar un poco y el maquillaje para mostrar toda la decadencia y el nerviosismo del protagonista.

Una adaptación visual y sonora

Sorprende para bien que un director casi novel como es Justin Kurzel haya conseguido una adaptación de Macbeth tan inspiradora y fiel. Una película que se centra en el impacto visual y sonoro, pero que al mismo tiempo no descuida las interpretaciones y el guión que, pese a basarse en una obra de teatro, está muy bien construido. Por ejemplo, nos dibujan a Macbeth como un general que sufre de estrés post-traumático. De esta forma, las alucinaciones y cambios que sufre no nos resultan tan extraños. Además, el director no tiene necesidad de dividir la cinta en actos, ellos se van sucediendo mediante va pasando la acción y sabes cuando el quinto acto está cerca. Kurzel consigue que todo encaje a la perfección.

Otro aspecto a destacar de Macbeth es su meticulosa fotografía de Adam Arkapaw (True Detective), con bellos paisajes escoceses y encuadres muy pensados para enaltecer ciertos momentos de la actuación de los actores y las acciones claves. Una película muy medida que te ayuda a empatizar con los personajes y a sufrir con ellos. Los pocos momentos de batalla, aunque breves, son muy épicos y crudos. Por último, la banda sonora compuesta por Jed Kurzel acompaña a la perfección la trama.

Lady Macbeth

Conclusión

Macbeth de Justin Kurzel es una gran adaptación de la obra de William Shakespeare y una demostración de que se pueden hacer buenas películas de obras literarias y teatrales. A pesar de algunas licencias, el guión es muy fiel a la obra y eso lo agradecerán los amantes del bardo inglés. Un gran trabajo con unas actuaciones a la altura de las circunstancias, pero que puede cansar aquellos que no estén familiarizados con las tragedias de Shakespeare y que despista ligeramente con el stop motion en las batallas. Una película cruda y en ocasiones sádica que trata de hacernos reflexionar sobre la ambición, la rendición y la guerra. Un buen cierre para el año 2015 y una esperanza para la adaptación a la gran pantalla del videojuego Assassin’s Creed.

Macbeth en la batalla

¡Comparte!

También te puede gustar

Crítica de Creed. La Leyenda de Rocky

 20 enero, 20160

Terminator Genesis Cinco79

Terminator: Génesis – Trailer honesto

 11 noviembre, 20150

Scarlett Johansson podría protagonizar una película sobre el Gamergate

 13 noviembre, 20150

Otros servicios

Copyright © 2019 Cinco79. Todos los derechos reservados..
Tema: ColorMag por ThemeGrill. Potenciado por WordPress.